Bernard Hopkins, de Golden Boy, quedó tan impresionado con Jaime Munguía como cualquier otra persona después de su actuación el sábado pasado por la noche.
Munguía, de México, dominó al inglés John Ryder en su enfrentamiento de peso súper mediano en el Footprint Center en Phoenix, Arizona, en camino a detener al rudo zurdo en el noveno asalto.
Munguía, quien derribó a Ryder dos veces en los primeros asaltos, anotó dos caídas más en el noveno asalto.
El resultado entusiasmó a los partidarios de Munguía, ya que ahora aumenta la presión para un enfrentamiento muy codiciado con Canelo Álvarez, el campeón indiscutible en la división de las 168 lbs. Sin embargo, Álvarez no está alineado promocionalmente con Golden Boy, por lo que es poco probable que el enfrentamiento se materialice pronto. Álvarez fue promovido previamente por Golden Boy antes de pasar por un amargo divorcio. Además, Álvarez se encuentra en medio de un acuerdo de múltiples peleas con el equipo rival Premier Boxing Champions.
Hopkins, un alto ejecutivo de Golden Boy, estaba emocionado por la forma en que Munguía despachó a un contendiente sólido, ya que le demostró que Munguía había crecido en la división. (Munguía se hizo un nombre en este deporte por primera vez como campeón en la división de 154 lbs). Álvarez, por el contrario, llegó hasta el final con Ryder cuando pelearon en mayo pasado.
“Creo que está listo”, dijo Hopkins sobre Munguía en una entrevista con FightHubTV. “Está más que listo. Vi aplomo, vi paciencia, pero también vi a alguien que superó algunas rondas en las que fue un toma y daca y no sucumbió a la implacabilidad y dureza de su oponente. Cuando cierras el espectáculo de esa manera, sabes como fanático o experto en boxeo que este es otro tipo de nivel, pensamiento, talento y competencia”.
“De cara al futuro, esto es una declaración, ¿una declaración de qué? Una declaración de que está listo para cualquiera que pese 168 lbs. Vez la fuerza, la energía y la persistencia. Presionó cuando necesitaba presionar el tema y dio un paso atrás para ver un poco mejor al adversario al que se enfrentaba. Una vez más, vi aplomo, también vi ejecución y vi a alguien que se siente cómodo en esa división de peso”.
