Buscando la pelea del millón de dólares
Para cualquier boxeador profesional cobrar una bolsa de un millón de dólares es su mayor meta, aunque en esta página miramos más por el legado, entendemos que el dinero es muy importante para los púgiles, más cuando estos suelen proceder de ambientes muy humildes donde las carencias son lo más habitual, por eso se utiliza la frase “un boxeador debe tener hambre”, muchas veces es de forma literal.
Por suerte para Sandor Martin no es este el caso, sino que su afición al noble arte es por haberlo mamado desde pequeño con su padre como dueño de un gimnasio, creció con los deportes de contacto. Así y todo debutó con apenas 18 años recién cumplidos, y se fue cociendo a fuego lento, también como le pasa a muchos boxeadores sufrió derrotas que le vinieron muy bien como aprendizaje.
Teófimo “The Takeover” López es lo contrario, un púgil que viene de un origen humilde, como inmigrante de Honduras, ha visto en el boxeo su salida de las dificultades de él y su familia, también es preparado por su padre, pero de forma poco común, ya que dice haber aprendido a través de videos, la forma de ser es completamente distinta, puesto que Teófimo y su padre son conocidos por ser unos “bocones”, mientras Rafa Martín y su hijo Sandor son mucho más moderados en sus declaraciones.
La pelea es una eliminatoria a 10 rondas de las 140 lbs del WBC, donde tras la enfermedad de José Pedraza, quien era el rival primigenio de Teófimo, el español Martin tuvo la oportunidad de tomar su lugar, pero sin duda está es una pelea más interesante porque se trata de un enfrentamiento entre un boxeador en alza como Sandor y otro que debe ‘rehabilitarse’ de su derrota contra el australiano George Kambosos.
Es de esperar un combate donde el hondureño presione y corte el ring a Sandor, porque este intentará hacer lo que mejor hace, que es pegar, salirse y dejar fuera de distancia a su rival, como Martin es un boxeador de la vieja escuela, entiéndase como que es un púgil profesional las 24 hrs del día los 12 meses del año, o sea siempre cerca del peso y preparado para pelear en dos a tres semanas, cuestión también diferente en Teófimo, quien suele dejarse estar entre peleas.
Considero que aunque Teófimo es ligeramente favorito, por tratarse de un ex campeón mundial, haber derrotado a Vasyl Lomachenko y ser un boxeador de una enorme fortaleza, que en las 140 lbs no sufre tanto para el corte de peso, pero si existe un equipo que sepa cómo contrarrestar a Teófimo es el de Sandor, quien sabrá hasta cuantas abdominales hace López al dia.
Aún así a veces no ganan los favoritos ni los mejores, sino los que mejor leen la pelea, si Sandor hace su pelea e impone su estilo, es muy posible una victoria a los puntos, una cuestión que le acercará a la soñada pelea del millón de dólares, mientras que Teófimo ya ha ganado esa cifra y parece estar pensando en próximos retos más que en la pelea del sábado, los llamados “Cuentos de la lechera” son normalmente un fracaso, esperemos que este sábado sea así y el estilista púgil catalán consiga la victoria.
