Un sueño que no pudo concretarse
Mario Martínez nació en Guadalajara, Jalisco, un 15 de Agosto de 1965, allí comenzó a entrenar desde muy pequeño en un gimnasio y a participar de peleas amateur, ya que mostraba excelentes condiciones para el deporte de los puños, se convierte en profesional siendo casi un niño aún, tenia solo 15 años y a partir de ahí comienza su meteórica carrera, enlazando una impactante seguidilla de triunfos.
Hasta que llega su primer derrota a los puntos, frente al experimentado Rosendo Alonso, Mario tenía recién 16 años y para ese entonces ya era conocido por todos como “Azabache”, luego de esta ajustada derrota vuelve a la senda del triunfo y enhebra una cadena de 21 victorias al hilo, lo que lo catapulta a las primeras planas del boxeo mexicano y le abre las puertas a un combate por el título del Mundo.
Esta, la pelea más importante de su vida, se da en el Olympic Auditorium de Los Ángeles, California en Septiembre de 1984 con el título del mundo súper pluma del CMB en juego, “Azabache” Martínez ya había tomado gran experiencia aunque aún estaba un poco verde, pues recién tenía 19 años y la suerte no lo ayuda, enfrente estaba la otra joven promesa del Box mexicano, con 22 años y de nombre Julio César Chávez.
El combate es una guerra sin cuartel y muy parejo, con Martinez llevando la iniciativa y siendo una máquina de tirar golpes, pero Julio César que ya mostraba la calidad que lo convertiría en leyenda, aguantaba todo como si nada y se mantenía contra golpeando con gran precisión, aplicando durísimos golpes y sus clásicos ganchos a la zona baja, que poco a poco van mermando la resistencia del joven y entusiasta “Azabache”
finalmente en el asalto ocho, Chávez avasalla a Martínez, lo arrincona y este ya sin energías y agotado es salvado por el árbitro de tal golpiza, quien detiene las acciones; luego de esta durísima derrota, Martinez vuelve a ganar varias peleas hasta que pierde una discutida SD ante Roger Mayweather, esto no lo amilana, regresa al gimnasio y vuelve a combatir venciendo a varios rivales hasta lograr su segunda oportunidad mundialista.
Esta vez el rival es el gran Azumah Nelson y el combate se hace en el foro de Inglewood, EE. UU., la pelea es tremenda, Martínez logra derribar en una oportunidad a Nelson, pero llegan a las tarjetas tras 12 frenéticosasaltos, un juez lo da ganador a “Azabache” pero los otros dos le dan el combate al ghanés, quien en un polémico y discutido fallo se corona campeón del mundo ante un nuevamente frustrado mexicano que ve escaparse otra oportunidad en su vida
Justo un año después se da la revancha en el Hilton de Las Vegas USA, pero esta vez Azumah Nelson domina ampliamente y se impone con un KOT en el 12 y último asalto, para todo esto Martinez recién tenía 23 años y ya toda una historia en el boxeo, en 1991 tiene su última oportunidad por una corona mundial y vuelve a caer ante el invicto africano Dingaan Thobela por pts. en un disputado combate, años más tarde logra un título “consuelo” de la poca prestigiosa IBO
Se retira con solo 30 años y una foja de [51(31KO)-9-2], un gran guerrero, un muy buen boxeador al que le fué esquivo el coronarse como campeón mundial, aunque hizo lo posible y puso su mejor esfuerzo, en mi humilde opinión creo que lo perjudicó mucho el empezar a pelear profesionalmente tan chico, llevó a los 20 años con casi 40 duros combates encima, arrastrando ya un desgaste que menguó su rendimiento. Si hubiese arrancado su carrera a los 18, probablemente le hubiesen llegado las oportunidades un poco después, ya con un físico más robusto y siendo un boxeador más “hecho”, pero bueno, la cosa se dió así, desde acá recordamos al gran “Azabache” Martínez y le rendimos un humilde homenaje.