Ya basta de hablar de Jaron Ennis. Brian “Bomac” McIntyre se ha cansado de escuchar su nombre y se enoja cuando los pronosticadores dicen que ha hecho lo suficiente para ganarse una pelea con Terence Crawford.
Desde el punto de vista de las habilidades, tal vez lo haya hecho. Pero en términos de sus logros y el valor de su nombre, luchar contra Ennis simplemente no vale la pena.
“No aporta nada”, dijo Bomac a un grupo de periodistas cuando se le preguntó si Crawford estaría dispuesto a pelear contra Ennis a continuación. “Él consiguió nuestras sobras”.
En general, Ennis, es irrelevante según Bomac. Recientemente ganó su primer título mundial, pero al veterano entrenador le cuesta respetar cómo se desarrollaron las cosas. Apenas unos meses después de que Crawford le propinara una paliza unilateral a Errol Spence Jr., para convertirse en campeón indiscutible, el organismo sancionador de la IBF despojó a Crawford y elevó a Ennis.
Su razonamiento era tenue según el equipo Crawford, pero han llegado a aceptar su decisión a regañadientes.
Aunque Ennis ha sido reprendido y ridiculizado por lo que muchos consideran un campeón del “correo electrónico”, está intentando utilizar su título recién otorgado a su favor. Hasta cierto punto, Ennis ahora tiene algo que Crawford quiere. Entonces, si quiere recuperar su estatus indiscutible, sólo podrá hacerlo luchando contra Ennis.
Bomac, sin embargo, no quiere oírlo. Ennis y sus seguidores están fanfarroneando descaradamente sobre una pelea que simplemente no sucederá. Desde su punto de vista, enfrentarse a Ennis es una situación en la que todos pierden. No le entregará a Crawford un dinero que le cambiará la vida, ni colocará un apéndice en su currículum del Salón de la Fama.
Por ahora, Crawford espera poder organizar una pelea con Canelo Álvarez. Hacerlo le proporcionaría todo lo que necesita antes de abandonar el deporte. Con Álvarez firmemente en mente, Bomac tiene una pregunta para el mundo del boxeo.
“¿Por qué Bud querría retroceder? Bud está buscando peleas mejores y más grandes para poder grabar su nombre en el concreto para siempre”.
