Jermell Charlo nunca había sido golpeado tan fuerte en una pelea profesional como Canelo Álvarez lo golpeó con una derecha al comienzo del séptimo asalto el sábado por la noche.
Charlo, quien estaba contra las cuerdas cuando Álvarez le partió la guardia con esa mano derecha, se arrodilló varios segundos después para recomponerse. Esa fue apenas la segunda vez en los 15 años y 38 peleas de carrera profesional de Charlo que cayó por un golpe.
Se recuperó relativamente rápido después de vencer el conteo del árbitro Harvey Dock y evitó ser derribado nuevamente en su camino a perder por decisión unánime en 12 asaltos en el T-Mobile Arena. Charlo explicó durante su conferencia de prensa posterior a la pelea lo que sintió al estar realmente lastimado por primera vez en una pelea y cómo se recuperó.
“Sí, ya sabes, esa fue mi primera vez, ya sabes, sintiéndome, ya sabes, como un disparo mareado”, dijo Charlo. “¿Usted sabe lo que quiero decir? Como si fuera yo quien siempre los da. Y sí, lo sabía mejor. Veo boxeo, he sido parte de él desde hace tanto tiempo que, ya sabes, si hubiera saltado ahí me habría avergonzado un poco”.
“Mierda, qué noche, ¿sabes?”, dijo Charlo. “Estoy orgulloso de mí mismo, ya sabes, me arriesgué, salté fuerte, después de una lesión en la mano, salté junto a los mejores, uno de los mejores de la división, uno de los mejores del boxeo. Así que tengo la cabeza en alto. Estoy orgulloso de mi mismo. He hecho un trabajo increíble para ‘Lions Only’ y mi grupo y mi equipo. Y me encanta el boxeo, así que no voy a ninguna parte”.
La única derrota anterior de Charlo fue una derrota por puntos mucho más competitiva ante Tony Harrison, quien derrotó a Charlo por decisión unánime para quitarle el título de peso súper welter del WBC en diciembre de 2018 en el Barclays Center en Brooklyn. Se vengó de su cerrada derrota ante Harrison noqueando al nativo de Detroit en el undécimo asalto de su revancha casi exactamente un año después en el Toyota Arena de Ontario, California.
