Stephen Fulton siempre ha salido victorioso. Si sus oponentes eran más grandes o naturalmente más dotados, nunca importó del todo: el nativo de Filadelfia siempre encontró la manera de llevarse la victoria.
El 25 de julio, el joven de 29 años esperaba más de lo mismo. Claro, Naoya Inoue fue visto como el gran hombre malo del boogie con talento generacional, pero Fulton no creyó ni por un segundo que no podría hacer el trabajo. Sin embargo, ocho meticulosos asaltos después, y Fulton se dio cuenta de que Inoue es quien dicen que es.
Sin embargo, no escuchará nada de Fulton en términos de excusas. En cambio, se acercó al espejo más cercano que pudo encontrar y se miró detenidamente. Con todo, Fulton sabe muy bien que necesita trabajar más duro que nunca.
“Regresa más fuerte, mejor y más inteligente”, dijo Fulton en su cuenta de redes sociales.
“No puedo esperar para redimirme contra él”.
El camino a la redención ahora está firmemente en la mente de Fulton. Una revancha inmediata está fuera de discusión, pero la estrella hábil tiene una forma creativa de volver a la mezcla. Lo primero es lo primero, Fulton abandona oficialmente la división de 122 lbs y plantará su bandera cuatro libras al norte.
A partir de ahí, Fulton buscará conseguir un título mundial. Convertirse en campeón de dos divisiones puede ser un sueño para él, pero más que nada, ve otra carrera por el campeonato como el cebo perfecto. En algún momento, Fulton espera que la luminaria libra por libra también suba de peso. Cuando lo haga, la inclinación de Inoue por los títulos mundiales lo llevará directamente a las manos de Fulton.
