¿Trinidad y Tobago en el Boxeo?
Hoy 26 de diciembre recordamos a una gran campeona de la que quizás no hayas escuchado hablar mucho, pero sin ninguna duda, ella hizo mucho y en muy poco tiempo, consiguiendo logros increíbles en el mundo del boxeo, para su país, la isla de Trinidad y Tobago. Si hablamos de esta isla en el plano deportivo y buscas logros en la competencia, ya sea de cualquier disciplina, para muchos el empate conseguido en el partido de fútbol ante Suecia, dónde un punto sumado en el mundial de Alemania 2006 ha sido su máximo logro deportivo a nivel internacional.
Pero pocos saben que hubo una boxeadora llamada Gissell “Magic” Salandy, una deportista que pudo hacer más historia de la que logró a pesar de su corta edad, un talento nato y con una juventud que aspiraba a lograr grandes cosas a futuro, si tenemos en cuenta lo obtenido en el corto tiempo durante el que fue profesional en este deporte.
Su palmarés ostenta un récord de: [16(6KO)-0], dónde logró ser la primera campeona mundial de las 154 lbs en versión WBA y WBC y defendió en cinco oportunidades estos cintos, obtenidos el 15 de septiembre del 2006 ante la norteamericana Elizabeth Mooney.
Gisselle fue una boxeadora de gran nivel, no tuvo la oportunidad de mostrar todo su potencial en el boxeo, un accidente automovilístico a los 21 años de edad en su pais natal, nos privó de seguir viendo la calidad de esta boxeadora, sin duda prometía grandes cosas su carrera pero la vida cambia en un segundo y asi fue el destino de esta campeona.
En cuatro años de carrera conquistó grandes cosas, desde su debut como rentada a la edad de 17 años y hasta su trágico fallecimiento a unos tempranos 21 años, fue dominante en su categoría, en una sola pelea disputó seis cetros (dos mundiales más cuatro de otros organismos no tan reconocidos). En el 2016 fue inmortalizada en el Salón internacional de la Fama Del Boxeo Femenino, dejando para la isla donde nació, una promesa de que pudo lograr mucho más todavía, pero lamentablemente se nos adelantó en el camino por esas extrañas decisiones del destino.
¡Descansa en paz Gisselle Salandy!