Como los cangrejos
Hay un conocido locutor mexicano que está en las antípodas de esta página, que ataca con el término ‘Cangrejos’ a quienes critican a los púgiles mexicanos, ya sean estas críticas justas o injustas. Sin embargo en castellano hay una expresión que me decía alguna vez mi querida madre que es: “vas para atrás como los Cangrejos”, la cual se utiliza para expresar la falta de progreso en alguna cuestión.
Dicha frase le viene como anillo al dedo al púgil mexicano Jaime Munguia, quien desde unos años a esta parte, más concretamente desde que dejase vacante su título WBO de las 154 lbs, realiza peleas que son cada más irrelevantes. Un boxeador que prometía ser una estrella en las 160 lbs, ha acabado haciendo ‘malabares’ para no enfrentarse al top de esa división.
Es tal el ridículo al que ha llegado este Munguía, que tras ser la mandatoria de Demetrius Andrade y Jermall Charlo, ha dado largas de forma poco clara para no ejercer esa opción. Tampoco quiere saber nada de Sergey Derevyanchenko, Carlos Adames o el Kazajo Zhanibek Alimkhanuly, habiendo llegado a las 40 peleas (32 KO) sin ninguna victoria relevante.
Esta vez su rival elegido por su ‘protector’ Óscar De La Hoya, es un desconocido para el público en general, como es el argentino Gonzalo Gastón Coria, quien presenta un récord discreto de [21-5], siendo el sexto clasificado por Argentina en las 160 lbs, podría por lo menos haberse enfrentado al también Argentino Marcelo Esteban Cóceres, quien ya ha probado su valor contra Edgar Berlanga o Billy Joe Saunders, pero como he afirmado, Munguía parece ir hacia atrás y no hacia adelante.
Entrando en la pelea, todo lo que no sea una victoria sencilla y antes del límite del boxeador azteca, será no sólo una tremenda sorpresa sino una enorme decepción para los planes de “Golden Boy”. Esperemos que Gonzalo nos de por lo menos tres o cuatro asaltos entretenidos y no sea noqueado en sólo dos rondas como le pasó contra Zhanibek Alimkhanuly, quien dicho sea de paso es el mejor rival que ha enfrentado el argentino en sus seis años de carrera. Me gustaría extenderme más, pero no sé puede sacar de donde no hay, es la pelea más sencilla desde 2019 para Munguía.
Para terminar con este poco atractivo duelo (para el público en general) diremos que la capacidad de Javier Munguía y su promotora para decepcionar, vender humo y perder absolutamente el tiempo en peleas sin ningún riesgo, es ilimitada. Vemos que este púgil y su promotor ‘Van para atrás como los Cangrejos’, pero por desgracia cobran las entradas como si estos combates fueran buenos realmente, cuando son un puro engaño y no un reto real.
