Un triunfo contundente
El número tres de las 147 lbs y posiblemente heredero del trono de la división, cuando Terrence Crawford o Errol Spence Jr suban de categoría o se retiren, es sin ningún tipo de duda el nacido y residente en la llamada “Ciudad del amor fraternal”, Philadelphia, hablamos de Jaron “Boots” Ennis, [31(28KO)-0], no fue precisamente abrazos y besos lo que le soltó Ennis a su rival de ayer. Es más, le propinó un castigo, que fue “In crescendo” ronda tras ronda, a su contrincante de la pasada noche del 8 de Julio.
Su rival en Atlantic City (The Ballroom, Boardwalk Hall) era el pegador Roiman Villa, desde ahora [26(24KO)-2], .Villa es uno de los típicos pegadores de la escuela de Venezuela, que suele ser el agresor en las peleas, buscando cortar el ring a sus rivales y teniendo la suficiente paciencia para buscar el momento donde la stamina del contrario baja, como le pasó en su última pelea donde sorprendió al invicto estadounidense Rashidi Ellis. Pero Jaron Ennis es harina de otro costal y vencerle se presupone bastante más difícil.
Para “Boots” era un combate donde debía lavar la relativa mala imagen de su anterior combate, pero Villa es un boxeador que fue a “guapear”, a dar guerra e intentar meter sus poderosas manos. Ennis que tiene muchísimos recursos, no tiene problema en boxear al contraataque, lanzado el jab y luego doblando con el hook de izquierda, un recurso que poco a poco entraba cada vez mejor y dañaba de forma ostensible al venezolano. La cara de Villa se iba entumeciendo cada vez más.
La mayoría de las rondas eran favorables para el norteamericano que mostraba mucha superioridad, mientras Villa cogía cada vez más castigo. De hecho entre el asalto ocho y nueve el doctor subió a revisar si todo estaba bien con el aspirante (en juego el interino de las 147 lbs del IBF). Tras dar el visto bueno para continuar, poco más duró el combate, apenas una ronda. Porque como dijimos, el Hook de izquierda de Boots entraba como un cuchillo en la cara de Villa. Tal fue así que una sucesión de golpes acabó con el combate.
Ahora nos toca esperar que sigue con Jaron “Boots” Ennis, quien debe estar a la expectativa del resultado del combate de unificación entre Crawford y Spence Jr. Es complicado que el ganador se enfrente al de Pennsylvania, quien seguramente deba construir su propio legado, cuando el ganador deje vacante el título IBF oficial, pero aún así hay buenas perspectivas de futuro en combates contra otros jóvenes púgiles,donde siempre será bueno recordar que Ennis será un favorito.
