Joe Joyce lucía en buena forma mientras caminaba por la alfombra roja en el enorme evento de lanzamiento de Tyson Fury vs. Francis Ngannou en Londres el jueves.
Joyce tiene algunos asuntos urgentes propios. El 23 de septiembre se enfrentará a Zhilei Zhang en una revancha que debe ganar por el título interino de peso pesado de la WBO.
A pesar de haber empujado previamente al altamente calificado Filip Hrgovic a una polémica derrota por decisión, Zhang, de 40 años, fue pasado por alto en abril, pero realizó una exhibición sobresaliente, derribando a Joyce y deteniéndolo en seis asaltos. Joyce inclinó la balanza a 256 lbs para la pelea, su nivel más bajo en cinco años, y parecía totalmente de mal humor. No es un error que planee repetir.
“Me siento bien. Estoy concentrado, un poco más pesado y listo para comenzar”, le dijo Joyce a Carl Frampton. “Si hubiera ganado la pelea así, no se habrían corregido los errores que cometí en el primer campamento. De cara al futuro, esto me ha dado una llamada de atención para hacer las cosas bien”.
En la primera pelea, Joyce intentó avanzar con su implacable forma habitual, pero pagó un alto precio por casi cada ataque. ‘The Juggernaut’ encontró que la postura zurda de Zhang era un rompecabezas difícil de resolver y rápidamente se quedó sin ideas, obligándose a seguir adelante a través de pura determinación. La pelea se detuvo debido a una severa hinchazón alrededor del ojo derecho de Joyce, pero él absorbió una cantidad preocupante de castigo durante toda la noche. A Joyce nunca le faltarán ganas y esfuerzo, pero tiene 37 años y sólo ha tenido cinco meses para hacer algunos cambios técnicos drásticos. No obstante, confía en haber hecho las cosas bien esta vez.
“Lo tengo todo bien. He sido mucho más disciplinado, concentrado y activo”, dijo. “Tal vez desvié un poco la vista de la pelota en la primera pelea y solo me estoy asegurando de haber marcado todas las casillas y los puntos sobre las íes. Es un poco más de práctica con la postura zurda en términos de sparring, técnica y táctica, pero también hacer que mi cuerpo sea más grande, más fuerte y más preparado para el trabajo de pelear contra Zhang. Zhang me sorprendió con su rápida precisión y potencia y esa noche me equivoqué en la táctica. Hubo muchas cosas que criticar que se han manejado en este campamento”.
