Ricky Hatton cree que Anthony Joshua no debería volver a trabajar con su equipo de entrenamiento actual después de que no intervinieron cuando tuvo su colapso después de su derrota ante Oleksandr Usyk en agosto pasado.
Hatton siente que los entrenadores de Joshua podrían haber evitado lo que sucedió con él arrojando los cinturones de Usyk fuera del ring y luego agarrando el micrófono y despotricando frente a los fanáticos.
Hatton dice que si estuviera trabajando en la esquina de Joshua, nada de esto habría sucedido porque lo habría abrazado y le habría hablado con sentido común.
La gran pregunta es, ¿por qué la esquina de Joshua no intervino para evitar que se comportara mal dentro del ring? ¿Estaban preocupados por lo que Joshua podría hacer si trataban de calmarlo? ¿Pensaron que los despediría?
Hasta el momento, Joshua no ha dejado a su entrenador, Robert García, ni a Ángel Fernández. Es dudoso que despida a alguno de ellos.
“Obviamente, no tomó la decisión final amablemente”, dijo Hatton a Secondsout
“Te acaban de ganar, lo entiendo, y debería haber sido alguien que lo abrazó y dijo: ‘Oye, AJ, vamos, amigo. Salgamos del ring porque no eres muy bueno’.
“No, permitieron que sucediera. Le permitieron tirar cinturones fuera del ring. Le permitieron conseguir el micrófono. ¿Qué estaba haciendo su esquina cuando lo vieron con el micrófono? Nunca más deberían estar en la esquina de nadie fue un comportamiento incorrecto, trabajo de esquina incorrecto”.
“Creo que eso podría haberse detenido. Si hubiera estado en la esquina, eso nunca hubiera sucedido porque podías verlo perder la cabeza. Necesitaba un brazo alrededor de él. ‘Vamos, amigo, volvamos a la esquina’.
“Simplemente se quedaron allí y lo observaron. Estuve en Tenerife viéndolo. Tenía ganas de arrancar la televisión de la pared”.
