Milagro en las 160 libras
La categoría de las 160 lbs ha sido históricamente la reina del boxeo, en ella se unen rapidez y pegada. Nombres como los del argentino Carlos Monzon, los estadounidenses Marvelous Marvin Hagler, Jake LaMotta, Harry Greb o Tony Zale, o más acá en el tiempo, Bernard Hopkins o el argentino Maravilla Martínez son leyendas de este peso. Cuando ser campeón mundial en la división del peso medio era como ser actor de Hollywood. Pero por desgracia llegaron púgiles como Canelo Álvarez o GGG, que impusieron una época oscura, en el otrora histórico peso. Y pasó a ser una división irrelevante, que daba vergüenza ajena.
Pero como no hay mal que cien años dure, tanto uno como otro están fuera de poner sus tentáculos sobre las 160 lbs. Como GGG dejó sus títulos WBA e IBF vacantes, por fin púgiles menos mediáticos, pero mucho más ambiciosos han ido a recoger la corona del peso rey del pugilismo. El llamado efecto Canelo también obligó al campeón WBO, Demetrius Andrade a abandonar su cetro, en busca de una utópica oportunidad contra el pelirrojo.
Zhanibek “Qazaq Style” Alimkhanuly [14(9KO)-0], es un púgil Kazajo, con amplia experiencia en el boxeo amateur, que tras ser eliminado en los juegos olímpicos de Río De Janeiro 2016, dio el salto al boxeo profesional. Su carrera ha sido lenta pero constante, en 2021 venció con contundencia al ex campeón mundial Rob Brant (TKO8) y a Hassan N’Dam N’Jikam por el mismo resultado. Ese le colocó como retador oficial de la WBO, como el título quedó vacante disputó el interino contra el inglés Danny Dignum a quien atropelló en solo dos rondas.
Vincenzo Gualtieri [21(7KO)-1], era un boxeador desconocido a nivel mundial hasta su pelea por el cinturón vacante de la IBF, su rival, el hasta esa noche invicto brasileño Esquiva Falcao era ampliamente favorito. Pero la noche del pasado 1 de Julio, el alemán apodado “Il Capo” dio la sorpresa, dando una auténtica master class, derribando en dos ocasiones a Falcao y ganando por una amplia decisión. Fue el día que un boxeador alemán volvió a reinar en las 160 lbs, donde el legendario Gustav Scholz es el más destacado.
Lo importante es que ambos boxeadores han elegido unificar cinturones, sabedores que asumir riesgos es mucho más rentable que dedicarse a realizar defensas fáciles y acabar perdiendo su título de todas formas. Los cinturones de la WBO e IBF estarán en juego, en un pleito donde el Kazajo es favorito para unificar, es de esperar que imponga su ritmo de pelea, frente a un más técnico Gualtieri. Lo más predecible es una victoria por amplio margen de Zhanibek, que tiene posibilidades de buscar metas mayores, sea como sea, por fin veremos una unificación verdadera en el peso medio.